Bogotá, 1 de diciembre de 2011
La falta de respiración y la pesadez del cuerpo fueron las principales señales que los 16 nadadores que conforman el equipo criollo de natación sufrieron en el primer día de entrenamiento con los 2.640 metros sobre el nivel del mar de la capital colombiana, en la previa de los XVII Juegos Sudamericanos Escolares 2011. De ellos, Macarena Vidal, Catalina Martínez y José Gálvez son de la región de Valparaíso, junto a los técnicos Paulina Rodríguez y al colombiano Jhon Riaño.
El team fue el primero de los nacionales en arribar tierras cafeteras, precisamente para aclimatarse al ambiente de un país tropical. Bien sabe de eso Jhon Riaño, quien llegó el 2009 al país y desde hace tres años trabaja con la categoría 12 a 14 años: “Esta categoría en Sudamérica es de alto nivel, por lo que nuestra idea es que varios de ellos puedan entrar a disputar finales”.
Una de las figuras debutantes de la quinta región es Catalina Martínez, alumna del Colegio Saint Dominic de Viña del Mar, que clasificó tras coronarse campeona de los Juegos Deportivos Escolares del IND en 400 metros libres con 4’47’’48, además de establecer nuevo record nacional en la categoría infantil B en los 50 m mariposa con un crono de 31’’07. “Espero rendir en mis pruebas, avanzar a las finales y poder atrapar lugares en el podio. Aunque soy la menor del grupo”, arguyó.
Otra de las cartas nacionales oriunda de la quinta región es Macarena Vidal, quien buscará entrar a disputar medallas en 50 m espalda y 400 libres. “Hoy soltamos en la piscina el viaje de 7 horas. Al principio cuesta por la altura, el oxigeno falta. Luego ya te vas a acostumbrando. La infraestructura es impresionante, eso me motiva. Quiero entrar a la final de los 100 m espalda”, comentó la estudiante del Colegio Valle del Aconcagua de Quillota, que por primera vez viaja a competir al extranjero pero que ya se ha fogueado a nivel internacional como local.
Finalmente, el crédito masculino José Gálvez también sintió la falta de oxígeno: “es lo que más mata, uno siente más pesado el cuerpo. Lo que uno hace a nivel del mar es difícil hacerlo aquí si no estás aclimatado”.
Sobre sus expectativas en 50 y 100 m pecho, señaló que “llegar a una final es más que meritorio. Alcanzar una medalla es como un sueño, pero se puede”.
El equipo chileno de natación inicia su participación en el certamen, del que también toman parte los locales junto a Argentina, Brasil, Uruguay, Ecuador, Perú, Bolivia, Paraguay y Venezuela, el sábado 3 de diciembre
